El Ministro Nacional de Educación, Nicolás Trotta contó que el nivel universitario “puede ser el que más tarde vuelva a la normalidad”, sin embargo, explicó que los niveles de educación inicial, primario y secundario son los que “más necesitan” el contacto físico con sus docentes. Aparentemente será un regreso “escalonado” y sin fechas probables.
El ministro nacional de Educación, Nicolás Trotta, dijo que el calendario académico que establecieron las autoridades de la Universidad de Buenos Aires -UBA- al Gobierno Nacional «lamentablemente no va a poder ser cumplido» dentro de la pandemia por el Covid 19, más conocido como “coronavirus”.
Durante los primeros días del mes de abril, la UBA viralizó la reprogramación de su calendario académico, el que determinaba el retorno al dictado de clases presenciales para el día primero de junio. Lamentablemente no podrá hacerse efectivo. «Es algo que hemos hablado con el rector, Alberto Barbieri. Nos presentó un calendario académico que, lamentablemente, no va a poder ser cumplido, porque la realidad de la pandemia implica que el 1 de junio no se van a poder retomar físicamente las clases», expresó el Ministro Trotta acerca del momento en el cuál el colectivo de enseñanza educativa retornaría a la modalidad presencial, en diálogo con la prensa local y según consignaron portales de noticias porteños.
Asimismo, el Trotta determinó que el nivel universitario «puede ser el nivel que más tarde vuelva a la normalidad», en relación a la modalidad presencial del dictado de clases. Cómo contraposición añadió que los otros niveles, por el inicial, primario y secundario, son los que «más necesitan» el contacto físico con sus docentes «para lograr el aprendizaje».
Acerca del regreso al esquema «normal», sobre el dictado de clases presenciales, soslayó: «Lo que termina mandando es la ciencia, y la realidad epidemiológica. No sabemos cuándo va a ser, pero trabajamos en el cómo volver a las aulas». Por horas de la mañana, en diálogo con radios porteñas, subrayó un «regreso escalonado” de las clases a nivel nacional.
Y adicionó: «Hay que ver el impacto epidemiológico. Volver con normalidad a las escuelas y las universidades es movilizar a casi 15 millones de personas y esto tiene impacto en la posibilidad de contagio”.