A pesar de las innumerables críticas y denuncias, el oficialismo porteño ratificó el convenio con IRSA en el parlamento de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La primera lectura del proyecto se aprobó con los treinta y siete votos del oficialismo de la Ciudad y sus alianzas. De esta forma, continua el mega desarrollo inmobiliario en la Costanera Sur, que consistirá en la construcción de lujosas torres.
La aprobación, en primera lectura, se concretó con treinta y siete votos a favor y veinte en contra. Según La iniciativa tuvo el acompañamiento de las siguientes fuerzas: Vamos Juntos, Partido Socialista y Unión Cívica Radical; y el rechazo de Frente de Todos, Partido de los Trabajadores Socialistas, Frente de Izquiera y de los Trabajadores Unidad y Autodeterminación y Libertad. La medida fue denunciada como “inconstitucional” por la organización Observatorio del Derecho a la Ciudad, los que advirtieron que la votación legislativa se efectuará “sin respetar las mayorías que establece la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires”.
Fundamentaron que “actualmente el bloque oficialista y sus aliados no cuentan con la mayoría de 2/3 de la Legislatura y van a votar este convenio urbanístico con la mayoría absoluta (mitad más uno=30+1)”. En este sentido, alertaron que “ya no sólo la planificación de la Ciudad sino también hasta el procedimiento de sanción de leyes está sometido a los intereses de la especulación inmobiliaria”.
Los bloques opositores, que en su oportunidad votaron en contra, demostraron su repudio: “Convencida de que este expediente debió haber tenido giro a la Comisión de Espacio Público que presido, es materia de la comisión porque estamos hablando de la recuperación de áreas costeras y creación de nuevo espacio público. Este es el terreno costero privado más grande que le queda a la Ciudad, hace falta una mirada de espacio público”, protestaron.
“Esta Legislatura es una verdadera escribanía al servicio de los negocios inmobiliarios, este proyecto en particular es importante porque es el más grande que se ha tratado aquí. Lo que se quiere hacer es un Puerto Madero dos que, encima, se va a hacer en un humedal… cuando en los últimos días hubo movilizaciones para defenderlos” y remarcó que “esto es un privilegio para los grandes empresarios mientras el 10% de la población de la Ciudad vive en villas”, concluyeron indignados.