Así lo expresó el auditor de la Ciudad Lisandro Teszkiewicz después de la apertura de sesiones en la Legislatura porteña del Jefe de Gobierno. «Su única prioridad es desviar fondos para privados”, indicó.
A la finalización del discurso de apertura de sesiones del Jefe de Gobierno de la Ciudad, el auditor general por el Frente de Todos, Lisandro Teszkiewicz indicó que «Larreta es un mentiroso profesional, se la pasa diciendo que la educación es una prioridad, pero los informes de la Auditoría demuestran que la única prioridad que tienen él y Soledad Acuña es hacer negocios con sus empresas amigas y desviar fondos hacia los privados».
Asimismo, en ese contexto ofrece ejemplos con el informe elaborado por la Auditoría General de la Ciudad que muestra irregularidades en la gestión financiera de la Dirección General de Educación de Gestión Privada dependiente del Ministerio de Educación de la Ciudad.
«Resulta patente en el informe el desprecio que la gestión de Soledad Acuña muestra hacia los organismos de control, cuando se niega a otorgar la información necesaria para identificar la matrícula de los y las alumnas de nivel inicial», agrega Teszkiewicz, “eso impide determinar si se cumplen o no con las metas presupuestarias, o si la asignación de recursos es compatible con lo que marca la ley. Los obstáculos que enfrentan los auditores para acceder a información indispensable, demuestran el interés de Acuña y Larreta por esconder sus negociados”.
Por otra parte, en el caso de los establecimientos de nivel inicial de Gestión Privada el apagón informativo que ocaciona el ejecutivo es vital ya que el estado es quien paga mediante transferencias el sueldo de los docentes y a la vez estos se designan en las escuelas a partir de las matrículas. Asimismo, en el informe se puede observar que de la información suministrada “no surge la documentación respaldatoria que aprobara la planta orgánica funcional de establecimientos educativos”.
«Mientras Larreta hace discursos, el cierre repentino del “Centro Educativo Nuevo Horizonte”, es una muestra de la inoperancia e ineficiencia del Ministerio de Educación en materia de control e intervención. Una vez más hemos podido comprobar que la falta de control hace el sistema educativo de gestión privada un agujero negro. Esto que está en los informes de Auditoría sale a la luz pública cuando se cierran instituciones que se manejan como emprendimientos comerciales sin ningún tipo de contralor por parte del estado, avasallando los derechos de los y las vecinas de la Ciudad”, comenta el auditor peronista.
En tanto, con una simple lectura del presupuesto se puede estimar que para el periodo auditado (2020), en los establecimientos de nivel inicial de Gestión Privada se gastaron $2.300 millones para atender a una matrícula de 64.552 alumnos desde 479 escuelas, es decir que para el mismo nivel la gestión estatal contó con 267 escuela para recibir 56.000 alumnos. O sea, un promedio de 210 estudiantes por escuela estatal contra 135 de los privados. “Esta notable desproporción nos muestra que el estado, manejado por Larreta y Acuña, se esfuerza para brindar una educación de calidad en el sector privado en desmedro de lo público. La ironía es que el ciudadano a través de sus impuestos sostiene las dos alternativas educativas, pero las voces críticas sólo se alzan para denostar a las escuelas públicas”, sostiene Teszkiewicz.
Al mismo tiempo, el auditor general agregó en referencia a la apertura del ciclo lectivo 2023 “Esta inclinación hacia la educación privada fue palpable en la escenografía montada el día lunes para el inicio del ciclo lectivo 2023. Esa forma de ver un acto escolar como un momento de marketing es muy descriptiva del pensamiento que está detrás de las políticas educativas de esta gestión”. Por otra parte, señaló que cuando el Jefe de Gobierno en la apertura de sesiones, dice que en “2007 el sistema estaba abandonado, los chicos a la deriva, docentes olvidados y la infraestructura en emergencia, parecía imposible de cambiar”, «miente descaradamente porque la situación no era tal hasta la llegada de Macri y Larreta, y cada informe de Auditoría va confirmando como las deficiencias de su gestión erosionan el nivel educativo, pero también, el desprecio por la educación en general, y la educación pública en particular, más allá de lo que declama”.
“En el análisis presupuestario queda claro que la prioridad de Larreta son los negocios y no la educación, en este 2023 destinara $ 62.887.407.674 en transferencias a la educación privada, lo que representa más de 7 veces y media el monto que dedicará a la infraestructura de las escuelas públicas, con poco más de 8 mil millones, sin contar con la baja de más de 10 puntos que sufrió el presupuesto educativo desde que Juntos x Cambio llegó al Gobierno de la Ciudad”, sostiene el auditor por la Ciudad.